Por John Revill
ZÚRICH, 23 sep - El Banco Nacional de Suiza (BNS) presentó el jueves una visión más cautelosa sobre la recuperación económica suiza y se desmarcó de la tendencia de los bancos centrales de Fráncfort y Washington al mantener con firmeza una política monetaria ultralaxa.
El impulso económico durante la recuperación pandémica se ha "ralentizado un poco", señaló el BNS al recortar su previsión de crecimiento del PIB para Suiza en 2021 en medio punto porcentual, hasta el 3%.
"En junio, el BNS seguía asumiendo un mayor crecimiento", dijo el banco en un comunicado, señalando una evolución más débil de lo esperado en el comercio y la hostelería.
"El BNS mantiene su política monetaria expansiva con vistas a garantizar la estabilidad de los precios y proporcionar un apoyo continuo a la economía suiza en su recuperación del impacto del impacto de la pandemia de coronavirus", dijo.
Dado que se prevé que la inflación suiza sea escasa —sólo aumentará hasta el 0,8% en el segundo trimestre de 2024—, el BNS se sintió poco presionado para empezar a subir su tasa de interés oficial, actualmente en el -0,75%.
La entidad se desmarcó así de los primeros movimientos del Banco Central Europeo y de la Reserva Federal de Estados Unidos para empezar a normalizar su política monetaria.
El BNS dijo que seguía dispuesto a intervenir en los mercados de divisas para frenar la apreciación del franco suizo, que sigue calificando de "muy valorado".
Las tasas negativos y las intervenciones han sido la piedra angular de la estrategia del presidente del banco, Thomas Jordan, para domar el franco en los últimos seis años. Jordan se reincorporó al trabajo para tomar la última decisión tras una operación de corazón el mes pasado.