Por Philip Blenkinsop
BRUSELAS, 13 oct - La Comisión Europea presentará el miércoles a Reino Unido un paquete de medidas para facilitar el tránsito de mercancías a Irlanda del Norte, aunque no llegará a implicar la amplia revisión que Londres exige de las normas comerciales para la provincia tras el Brexit.
Las medidas del ejecutivo de la UE están diseñadas para facilitar los controles aduaneros, por ejemplo en el envío de carne, productos lácteos y otros productos alimenticios y el flujo de medicamentos a la provincia británica desde la isla de Gran Bretaña.
Sin embargo, no abrirá la renegociación del protocolo que rige la posición comercial única de Irlanda del Norte, lo que deja a Bruselas y a Londres en un posible curso de colisión.
Maros Sefcovic, vicepresidente de la Comisión encargado de las relaciones entre la UE y el Reino Unido, presentará los planes a los países de la UE y a los miembros del Parlamento Europeo el miércoles por la tarde, antes de una conferencia de prensa prevista para las 18.30 horas (1630 GMT/1230 EDT).
La Comisión también expondrá sus planes para colaborar más con la población de Irlanda del Norte.
Las propuestas podrían permitir a los supermercados suministrar a las tiendas norirlandesas embutidos y otros productos cárnicos refrigerados procedentes de Reino Unido cuya entrada en la Unión Europea está prohibida, y por tanto, en teoría, en Irlanda del Norte.
Aunque sigue formando parte del Reino Unido, Irlanda del Norte ha permanecido en el mercado único de bienes de la UE, lo que significa que sus exportaciones al resto del bloque no se enfrentan a controles aduaneros, aranceles ni trámites.
Sefcovic ha dicho que el acuerdo permite a las empresas norirlandesas disfrutar de lo mejor de ambos mundos. Sin embargo, el resultado es una frontera aduanera efectiva en el mar de Irlanda, que complica el comercio de Reino Unido a Irlanda del Norte e irrita a los unionistas probritánicos de la provincia.
Según los planes de la Comisión, las salchichas británicas, por ejemplo, podrían entrar en Irlanda del Norte siempre que estuvieran destinadas exclusivamente a los consumidores norirlandeses.
"Esa es nuestra propuesta. La pondremos sobre la mesa. Si... se rechaza, entonces sí que tenemos un problema", dijo Sefcovic en comentarios la semana pasada.
El ministro británico para el Brexit, David Frost, dijo en un discurso el martes que Londres estaría dispuesto a debatir las propuestas "digan lo que digan", pero también exigió un nuevo protocolo "con visión de futuro" que no incluya la supervisión de la justicia europea.
La UE ha indicado que no concibe que un organismo distinto del máximo tribunal de la UE pueda decidir sobre el mercado único comunitario.
Sefcovic también señaló que durante su visita del mes pasado a Irlanda del Norte, casi nadie planteó el Tribunal de Justicia Europeo como un problema.