Por Susan Mathew y Devik Jain
14 jul - Las acciones de empresas de materias primas y bancos arrastraron el jueves a la baja al STOXX 600 europeo, porque más apuestas a alzas de tasas agresivas de la Reserva Federal alentaron el temor a una recesión, mientras que el principal índice de Italia se desplomó un 3,4% ante el riesgo de colapso del Gobierno.
* El índice paneuropeo STOXX 600 cerró con un descenso del 1,5%, que se sumó a la caída del 1% del miércoles, cuando la elevada inflación de Estados Unidos estimuló las apuestas a que la Reserva Federal podría subir las tasas más de 75 puntos básicos este mes.
* La renta variable mundial se ha visto afectada este año por los intentos de los bancos centrales de controlar la creciente inflación, lo que ha hecho que los inversores se preocupen por el impacto en el crecimiento económico. El STOXX 600 ha perdido un 16% en lo que va de año.
* La Comisión Europea recortó sus previsiones de crecimiento económico de la zona euro para este año y el próximo y revisó al alza sus estimaciones de inflación.
* "El temor a la recesión sigue estando presente en la mente de los inversores", dijo Bert Colijn, economista senior de ING para la zona euro.
* Colijn añadió que las preocupaciones también se derivan de una mayor discrepancia entre el Banco Central Europeo y la Reserva Federal, ya que se considera que el primero se aferra a una subida de 25 puntos básicos la semana que viene, a pesar de que la inflación está en máximos históricos.
* Por otra parte, la caída del euro por debajo de la paridad, hasta un mínimo de 20 años frente al dólar, también supone un problema para la inflación de la zona euro.
* En la reunión del BCE de la próxima semana, los inversores estarán atentos a cualquier comentario sobre la caída del euro y la herramienta para controlar la ampliación de los diferenciales de los bonos de la zona euro, así como a una previsión de la inflación y a pistas sobre la magnitud de las futuras subidas.
* El índice MIB italiano cayó un 3,4% y cerró en su nivel más bajo desde noviembre de 2020 después de que el Movimiento 5 Estrellas, miembro de la coalición de Gobierno, no apoyara una votación de confianza parlamentaria que incluía medidas para compensar la crisis del costo de la vida en Italia.