9 sep - La presidenta del Banco de la Reserva Federal de Kansas City, Esther George, abogó el viernes por una "respuesta de política monetaria sostenida" frente a la inflación, en sus últimas declaraciones antes de la próxima reunión de la Fed para fijar las tasas de interés dentro de dos semanas.
"Tendremos que determinar el curso de nuestra política monetaria a través de la observación y no de la referencia a los modelos teóricos o a las tendencias anteriores a la pandemia", dijo George, en unas declaraciones preparadas para una conferencia en el Instituto Peterson de Economía Internacional.
George señaló que sería "probablemente sólo una especulación" opinar sobre el nivel que deberá alcanzar finalmente la tasa de interés oficial de la Fed.
"Dados los probables retrasos en la transmisión de una política monetaria más restrictiva a las condiciones económicas reales, esto aboga por la constancia y la determinación más que por la velocidad", dijo.
George ha sido una voz constante que ha advertido contra las subidas bruscas de tipos, que podrían aumentar la volatilidad, desde que la Reserva Federal comenzó a elevar las tasas a su ritmo más rápido desde la década de 1980 para luchar contra el peor brote de inflación desde entonces.
Se espera que dentro de dos semanas la Reserva Federal decida entre una tercera subida consecutiva de los tipos de 75 puntos básicos, que elevaría el rango objetivo de la tasa de interés oficial al 3%-3,25%, o una menor de medio punto.
Los mercados esperan en general lo primero, al igual que muchos economistas, y algunos señalan que el presidente de la Fed, Jerome Powell, que habló a principios de esta semana, no se opuso a las expectativas de los agentes.
Las declaraciones de George señalan su apoyo a una respuesta más lenta, pero quizás más sostenida, a las presiones de los precios provocadas por la pandemia.
En sus comentarios, George también pidió que la Reserva Federal dé una señal clara de "resolución" para reducir su balance.
"Puede ser beneficioso anunciar los niveles de reservas deseados a medida que el balance se reduce, dando a los bancos tiempo para prepararse para operar con un número significativamente menor de reservas", dijo.