14 sep - La guerra de Siria, que dura ya 11 años, corre el riesgo de volver a estallar con un combate a gran escala, después de que varios frentes del país se hayan recrudecido en los últimos meses, advirtió el miércoles la ONU en un nuevo informe.
"Siria no puede permitirse una vuelta a los combates a gran escala, pero es hacia donde puede dirigirse", dijo Paulo Sérgio Pinheiro, presidente de la comisión de Naciones Unidas para Siria.
Cientos de miles de personas murieron y millones se quedaron sin hogar desde que unas protestas contra el presidente Bashar al-Assad en 2011 dieron paso a una guerra civil en la que participaron potencias extranjeras y dejó a Siria dividida en varias zonas de control.
Los combates se han enfriado en los últimos años después de que Irán y Rusia ayudaron a Assad a reconquistar el 70% del territorio sirio, de que Estados Unidos apoyara a los combatientes kurdos que derrotaron a los militantes del Estado Islámico y de que Turquía estableciera una zona de amortiguación cerca de su frontera. No obstante, la ONU dijo que las líneas de contacto entre varias áreas ahora están comenzando a calentarse de nuevo.
"En algún momento tuvimos la idea de que la guerra había terminado por completo en Siria", dijo Pinheiro a los medios en Ginebra, añadiendo que los incidentes documentados en el informe demuestran que no es así.
El informe, de 50 páginas, concluye que "las graves violaciones de los derechos humanos fundamentales y del derecho humanitario" han aumentado en todo el país en los primeros seis meses del año.
Entre ellas se incluyen los combates y los bombardeos aéreos en el noreste y el noroeste del país, que dejaron decenas de civiles muertos y restringieron el acceso a los alimentos y al agua, según el informe.
En las zonas controladas por el gobierno, la Comisión documentó la muerte de antiguos dirigentes de la oposición, asaltos a domicilios y continuas torturas y malos tratos en los centros de detención.
Los ataques aéreos rusos sobre las zonas controladas por la oposición han aumentado aún más en los últimos meses, dijo la comisionada Hanny Megally. "Estamos viendo un aumento de la violencia", afirmó.
También documentó más de una docena de ataques israelíes en toda Siria en los primeros seis meses de 2022, incluido un ataque contra el aeropuerto internacional de Damasco que dejó el lugar fuera de servicio durante casi dos semanas.