Por Alistair Smout y Kylie MacLellan
LONDRES, 26 sep – El gobierno británico no hace comentarios sobre los movimientos del mercado y se atiene al plan fiscal que expuso la semana pasada, dijo el lunes un portavoz de la primera ministra, Liz Truss, después de que la libra tocó un mínimo histórico frente al dólar y los bonos británicos se hundieron.
La fuerte liquidación de activos británicos se produjo tras la iniciativa fiscal presentada el viernes por el ministro de Finanzas, Kwasi Kwarteng, que recortó una serie de impuestos sin detallar cómo se financiaría.
Kwarteng declinó hacer comentarios el domingo sobre el desplome de la libra y afirmó que está centrado en el crecimiento a largo plazo y no en la reacción del mercado a corto plazo.
“El ministro dejó claro que no comenta los movimientos del mercado y lo mismo ocurre con la primera ministra”, dijo el portavoz de Truss.
Asimismo, afirmó que no hay planes para hacer ningún cambio en las medidas establecidas, que describió como “un plan para el medio y largo plazo, que consiste en cambiar fundamentalmente nuestro enfoque de la economía con un enfoque en el crecimiento”.
Kwarteng ha hecho recaer en el Banco de Inglaterra la responsabilidad de contener cualquier efecto inflacionista de la enorme expansión fiscal y la semana pasada dijo al gobernador Andrew Bailey que espera que el banco central tome las medidas contundentes necesarias para contener la inflación.
Cuando se le preguntó si el gobierno esperaba que sea el Banco de Inglaterra, en lugar de los ministros, el que haga el trabajo pesado para contener la inflación, el portavoz de Truss dijo que un paquete para ayudar a los hogares con las facturas de energía podría restar 5 puntos porcentuales a la inflación.
“Es correcto que consideremos la mejor manera de controlar la inflación y, por supuesto, eso es algo que el gobierno tiene en cuenta”, dijo, añadiendo que cualquier futuro recorte de impuestos insinuado por Kwarteng el domingo es competencia del ministro de Finanzas.
