PEKÍN, 18 ene - El sector inmobiliario de China cayó un 5,1% en 2022 respecto al año anterior, mostraron el miércoles los datos de valor añadido de la Oficina Nacional de Estadísticas, lo que aumenta la presión sobre los dirigentes económicos para reactivar el lento sector en 2023.
El valor añadido de la otrora poderosa industria fue un 7,2% inferior en el cuarto trimestre que un año antes, tras la contracción anual del 4,2% observada en el tercer trimestre, según los datos de la oficina.
Las cifras indican que el sector inmobiliario fue uno de los mayores lastres para la economía el año pasado.
El crecimiento económico de China en 2022 se desplomó a una de sus tasas más débiles en casi medio siglo, golpeado por el desplome del mercado inmobiliario y por los controles de la pandemia y los brotes de COVID-19, que afectaron especialmente al segundo y cuarto trimestres.
Las autoridades han desplegado un aluvión de políticas para ayudar a los compradores de viviendas y a las promotoras inmobiliarias y aliviar una prolongada escasez de liquidez en el sector que retrasó la finalización de muchos proyectos de viviendas.
A pesar de este esfuerzo, la inversión en el sector inmobiliario en 2022 fue un 10,0% inferior a la de 2021, el primer descenso desde que se iniciaron los registros en 1999, y las ventas de propiedades sufrieron el mayor desplome desde 1992, mostraron los datos de la Oficina Nacional de Estadísticas el martes.
El vice primer ministro Liu He dijo el martes en la reunión anual del Foro Económico Mundial en Davos que China apoyaría el desarrollo saludable del mercado inmobiliario, ya que el sector seguía siendo una industria pilar para la economía.
Durante una videoconferencia celebrada por el Ministerio de Vivienda y Desarrollo Urbano y Rural el martes, el regulador se comprometió a promover la finalización y entrega de viviendas a los compradores, ayudar a resolver los riesgos de financiación de las empresas inmobiliarias y apoyar por igual los balances de las empresas inmobiliarias estatales y privadas.