¡Hasta nunca 2020! Año de pandemia, pero sobre todo de resiliencia

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El 2020 arrancó con una escalada de tensiones sin precedentes entre Irán y Estados Unidos después de que el el presidente Donald Trump ordenase la muerte del general iraní Qasem Soleimani en un ataque con drones y de que, al emprender represalias, un misil iraní abatiese por error un avión canadiense.

Al borde de que se proclamara la guerra entre ambas naciones, las aguas se calmaron y la actualidad se centró en la historia que nos marcará durante generaciones: la pandemia del coronavirus.

El mundo paró en marzo y media humanidad se pasó meses confinada mientras las muertes por el nuevo virus se disparaban. Entonces comenzaron los aplausos en los balcones a las 8 de la tarde, los aviones aparcados en aeropuertos desiertos y las mascarillas empezaron a volverse accesorio obligatorio en las calles mientras la distancia de seguridad y el teletabajo trazaban fronteras invisibles a nuestra vida social.

Cuando el verano llegó al hemisferio norte, la pandemia dio un respiro y las ciudades empezaron a desconfinarse.

Y mientras la 'nueva normalidad' ganaba terreno, Beirut se convirtió desafortunadamente en el centro de la actualidad. Una descomunal explosión cuya onda expansiva se sintió a varios kilómetros de distancia mató a más de un centenar de personas hiriendo a unas 3.000 en la capital del Líbano. Las calles quedaron derruidas de la noche a la mañana como si hubieran sido objetivo de un intenso bombardeo.

Otra de las imágenes más impactantes fue la muerte en directo del afroamericano George Floyd mientras era inmovilizado por unos policías a plena luz del día. Antes de morir pronunció una frase que marcó el incio de una oleada de protestas antiracistas en todo el mundo: "No puedo respirar".

Manifestantes, desde Bélgicahasta México, se lanzaron a derribar estatuas consideradas símbolos de la opresión racista y así se forjó una nueva palabra "estatuafobia".

Así llegaron las elecciones de Estados Unidos determinadas inevitablemente por la pandemia que Trump afrontó dando la espalda a la ciencia y la indignación movilizada por Black Live Matters con la que el magnate estadounidense tampoco empatizó.

En noviembre, el binomio Joe Biden y Kamala Harris ganaron las elecciones presidenciales. Él es el presidente más veterano de la historia del país, ella, la primera mujer, la primera afromericana y la primera con ascendencia asiática en ocupar el rol de vicepresidenta. El Times considera que han hecho historia y por eso les ha nombrado la persona del año 2020.

Al otro lado del océano Atlántico, Europa cerraba una herida que llevaba cuatro años abierta. Las negociaciones para un acuerdo de Brexit llegaban a su fin horas antes de Navidad. La Unión Europea y Reino Unido finalmente estrechaban la mano y cerraban un doloroso y largo proceso de divorcio.

Y mientras la actualidad política daba un vuelco en Estados Unidos y se ponía de acuerdo en Europa, la pandemia volvía a recrudecerse con una segunda oleada que disparaba de nuevo el número de casos y muertes. Y con este volvían las restricciones.

Pero diciembre, abría la puerta a la esperanza. Las vacunas han llegado. Y ciudadanos en todo el mundo ya las han recibido. Vacunas que se han desarrollado en un tiempo récord y que cuentan la mejor historia del 2020. La de la resiliencia humana.