Violentas manifestaciones entre ciudadanos y policía. Unas imágenes que se han ido sucediendo en Ankara y Estambul desde el lunes después de que el
Violentas manifestaciones entre ciudadanos y policía. Unas imágenes que se han ido sucediendo en Ankara y Estambul desde el lunes después de que el Gobierno turco haya tomado de facto el control de un importante grupo empresarial, propietario de dos televisiones y dos diarios vinculados a un clérigo exiliado en Estados Unidos y enemigo del presidente Recep Tayyip Erdogan. Mientras tanto, la oposición ha acusado al AKP de cortar el cableado de las televisiones para provocar un apagón informativo a las puertas de las elecciones. Además, diversos periodistas han sido arrestados.
El grupo Koza Ipek Holding ha sido intervenido judicialmente, solo con petición de la Fiscalía. Este hecho tiene lugar en el marco de una investigación por supuesta financiación del terrorismo, ya que el conglomerado es próximo al predicador Fethullah Gülen. Más medios podrían ser intervenidos próximamente.
En los últimos 25 días, el 90% de las transmisiones en vivo de la televisión estatal TRT han sido dedicadas al presidente Erdogan o a su partido AKP, mientras que el prokurdo HDP solo ha gozado de 18 minutos.