El Banco de Japón vuelve a retrasar el plazo para lograr la inflación deseada del dos por ciento, después de casi dos décadas de deflación. En
El Banco de Japón vuelve a retrasar el plazo para lograr la inflación deseada del dos por ciento, después de casi dos décadas de deflación. En septiembre, se repitió por segundo mes consecutivo una inflación negativa del 0,1 por ciento tras veintisiete meses de subidas. En su reunión de política monetaria, los responsables del organismo decidieron posponer de nuevo sus objetivos.
“El tiempo para alcanzar el dos por ciento como objetivo de inflación se ha retrasado de la primera a la segunda mitad del año fiscal 2016-2017, pero se debe sobre todo a los efectos de la caída de los precios energéticos”, declaró el gobernador Haruhiko Kuroda.
Hasta ahora, el plazo dado era la primera mitad del próximo año fiscal. Es decir, a principios de 2016. Ya, en abril pasado, se tuvo que renunciar a que el dos por ciento se alcanzara este año. Para el ejercicio 2015-2016, que en los presupuestos japoneses termina el 30 de marzo, la institución se conforma solo con una subida del 0,7. Y no se descartan nuevas medidas de estímulo monetario para la tercera economía del mundo.