Día de reflexión en Venezuela horas antes de las elecciones que hacen temblar al chavismo

Pese a aferrarse al ex líder Chávez, el presidente, Nicolás Maduro, tiene en su contra una popularidad y la economía del país por los suelos.
En la recta final de la campaña, el gobierno ha intensificado su campaña para movilizar a sus bases desencantadas que podrían desertar las urnas. La brecha abierta por la oposición se ha reducido, según las encuestas y todo apunta a un resultado ajustado.
Jenny Parra, una enfermera de Caracas apuesta por la continuidad: “apoyo la gestión del gobierno y la única manera de seguir es votando.”
Rafael Álvarez, arquitecto retirado asegura “que no pueden más, que la gente está tan desesperada a causa de la inseguridad y la falta de productos básicos.”
Superando sa fragmentación crónica, la oposición venezolana acude unida a las urnas, única manera de conseguir votos ya que el sistema electoral favorece al chavismo. Habla la esposa del líder encarcelado, Leopoldo López, Lilian Tintori: “Con este voto habrá un antes y un después en Venezuela, con este nacerá la luz, el alumbramiento de una nueva era, una nueva era en la que tenemos que trabajar unidos y en paz.”
La misión de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) ha expresado sus “inquietudes” sobre el actividades “complementarias al proceso electoral” como el llamado “voto asistido” o con acompañante y la hora de cierre de las mesas de votación.
Una delegación de antiguos presidentes de Latinoamércia ha mostrado su preocupación por la polarización de la sociedad venezolana y ha pedido que se respeten los comicios.