Se trata de un grupo de la minoría de turcos meskhi que reside en el este del país. Vivieron en Georgia hasta los años 40 y fueron deportados por las
Se trata de un grupo de la minoría de turcos meskhi que reside en el este del país. Vivieron en Georgia hasta los años 40 y fueron deportados por las autoridades soviéticas a Uzbekistán, desde donde se movieron a otras regiones de la antigua URSS.
Ahora lo que quieren es dejar atrás la violencia que se vive en el este de Ucrania y han pedido ayuda a Ankara, que les acogerá en Turquía.
“Hemos permanecido escondidos en sótanos días, incluso semanas. Estábamos hambrientos y preocupados. Teníamos la tensión muy alta, pasó de todo. Pero vivimos, gracias a Ucrania. Gracias, gracias”, ironizaba un hombre.
Los bombardeos y disparos han afectado psicológicamente a todos ellos, en especial a los niños. La mayoría ha pasado toda su vida en Ucrania y dejan el país con tristeza.
“Todo iba bien, las relaciones con los vecinos y con todo el mundo eran buenas. Es una pena dejarlo todo”, se lamenta una mujer.
El Gobierno de Ankara tomó la decisión de evacuarles en abril del año pasado. Alrededor de 2.000 turcos meskhi llegarán a Turquía en las próximas semanas.
Los que ya han llegado han recibido alojamiento y se les proporcionará trabajo.