Aksel Lund Svindal ya puede tachar de su lista de objetivos cumplidos el triunfo en la pista austríaca de Wengen, una de las pocas que le quedaban
Aksel Lund Svindal ya puede tachar de su lista de objetivos cumplidos el triunfo en la pista austríaca de Wengen, una de las pocas que le quedaban por conquistas.
Ni la espesa niebla con la que se ha levantado este sábado la localidad austríaca ha sido un obstáculo para que el noruego se alzara con el triunfo en la prueba de descenso.
Svindal ha completado el recorrido, acortado por la escasa visibilidad, en un tiempo de 1:48.79.
Además de trasladar la salida a una cota más baja, la prueba ha tenido que ser interrumpida en dos ocasiones ya que resultaba imposible continuar con tales condiciones climatológicas.
Una vez restablecida la carrera, el austríaco Hannes Reichelt, arropado por el público local que lo esperaba en la línea de meta, ha terminado segundo a 19 centésimas de Svindal.
Otro esquiador local, esta vez Klaus Kroell ha finalizado tercero a casi dos segundos de la cabeza.
Gracias a este triunfo Svindal aumenta su ventaja al frente de la clasificación en la modalidad de descenso y arrebata el liderato en la general de la Copa del Mundo de esquí alpino a Marcel Hirscher, ausente en Ruhpolding.
El próximo fin de semana Svindal tiene otro gran objetivo marcado: la prueba de descenso en Kitzbühel, otro gran clásico que falta en su palmarés.