Muchos de los sirios que huyen de la guerra tienen formación universitaria y están altamente cualificados. Algunos de ellos fueron contratados por
PUBLICIDADMuchos de los sirios que huyen de la guerra tienen formación universitaria y están altamente cualificados. Algunos de ellos fueron contratados por los museos más importantes de Berlín como guías.
Son ahora estas mismas personas las que pueden atraer a nuevos visitantes entre otros, al Museo de Pérgamo. Algunos de ellos son también refugiados que acaban de llegar.
Es el caso de Yara Al Abdallah Syrian: “Es la primera vez que veo esto. Estoy impresionada, es algo nuevo para mí”.
Hay gran demanda de los guías que se expresan casi siempre inglés o en árabe, algo que no era común en los museos alemanes, al menos hasta ahora.
Otro solicitante de asilo, el doctor Alaa Eddin Ghadri reflexiona en el museo de Pérgamo: “Sé que todo lo que hay aquí es asirio pero no sé si es cristiano, chií o suní. Y no importa nada de nada. Hemos venido aquí a vivir en paz y queremos que se acaben los crímenes”.