La decepción se apoderó de los seguidores rusos de Eurovisión. Convencidos de que Sergei Lazarev y su espectacular puesta en escena vencerían en
La decepción se apoderó de los seguidores rusos de Eurovisión. Convencidos de que Sergei Lazarev y su espectacular puesta en escena vencerían en Estocolmo, no solo tuvieron que asumir el golpe de la derrota, sino que el triunfó de una canción ucraniana que el Kremlin consideró un ataque político a Rusia.
“Por supuesto, estaba con nuestro cantante. La política ha estallado en la música. La política manipula nuestra música, lo cual es muy triste”, explicó Anna Penkova, pensionista, mientras atravesaba la Plaza Roja de Moscú.
Maria Bukharova, directora de una empresa turística, detectó cierta manipulación: “Obviamente, toda Europa apoya a Ucrania. Fue tan transparente. Desde mi punto de vista estuvo demasiado claro, demasiado obvio… porque todo el mundo comprendió que el verdadero ganador fue nuestro Sergey Lazarev”.