Se aleja de la costa convertido en ciclón, pero todavía peligroso.
Se aleja de la costa convertido en ciclón, pero todavía peligroso. Uno de los principales riesgos ahora son las inundaciones que ha dejado atrás, de ahí que el Presidente Barack Obama haya activado el estado de zona catastrófica en las dos Carolinas. La última lista de víctimas habla de 33 muertos, 18 de ellos en Carolina del Norte. Los equipos de rescaten buscan a supervivientes. Las autoridades recomiendan precaución.
Pat McCrory, Gobernador de Carolina del Norte:
“No se acerquen al agua. Ya hemos tenido más de una decena de muertos a causa de esto. No sean imprudentes y no pongan en peligro la vida de otras personas, que deban arriesgarse para salvarles a ustedes por haber tomado una mala decisión. Ya hay demasiadas víctimas”
La Protección Civil estadounidense teme que varios ríos de la zona afectada se desborden y puedan causar daños adicionales. A estas horas, solo en Carolina del Norte hay más de 800.000 hogares y comercios sin electricidad.
En Florida, el primer estado donde se sintieron los efectos del huracán, continúan las labores de limpieza y recuperación del tendido eléctrico.