La policía de la localidad belga donde Es Satty residió en 2016 alertó a los Mossos de las actividades sospechosas del imán.
Las autoridades belgas previnieron a los Mossos de escuadra de la radicalización del imán de Ripoll. Fue la policía de Vilvoorde quien se dirigió a los agentes catalanes para intentar averiguar si tenían datos sobre Abdelbaki Es Satty, que residió en la pequeña localidad belga durante tres meses el año pasado y habría llevado a cabo actividades sospechosas según la policía local.
Barcelona: más policía en la calle y obstáculos móviles en puntos de gran afluencia https://t.co/Ck7XhErJA6pic.twitter.com/2Jjv12eD2e
— euronews español (@euronewses) 24 août 2017
El número dos de los Mossos, Daniel Canals, respondió a sus colegas de Vilvoorde diciendo que Es Satty “no era conocido”, pero una persona con el mismo apellido había sido investigado por sus vínculos yihadistas en una operación anterior.
La Generalitat se defiende ahora argumentando que este intercambio fue informal y que las comunicaciones oficiales siempre se realizan a través de Madrid, del Ministerio del Interior.
Es Satty murió en la explosión accidental de la casa de Alcanar donde se preparaba bombas para un atentado.