Fracasa el intento de diálogo entre la oposición y el expresidente y ahora primer ministro Serge Sargsián
Nikol Pashinián, cabeza visible de las protestas contra el Gobierno armenio, ha sido detenido en estas últimas horas.
Su detención ha tenido lugar después de que este destacado diputado opositor haya sacado de sus casillas al expresidente y ahora primer ministro Serge Sargsián en una reunión televisada durante la que Pashinián ha pedido insistentemente la dimisión de Sargsián.
Tres minutos ha aguantado el primer ministro, quien arropado por sus guardaespaldas se ha levantado y se ha ido.
Sargsián acusa a los manifestantes de querer hacer chantaje al Gobierno. "Esto no son ni conversaciones, ni diálogo, ni nada, sólo un ultimátum, un chantaje al Estado, a las autoridades legítimas", ha dicho.
Tras una década como presidente, Sargsián ha asumido ahora como primer ministro más competencias, dejando la jefatura del Estado como un puesto simbólico. Todo gracias a las reformas constitucionales y a la luz verde que recibió el martes del Parlamento armenio. Desde entonces las calles de la capital son escenario de contínuas manifestaciones de protesta.
El tono de las movilizaciones ha aumentado y también la respuesta de la polícia que este domingo ha desplegado a las fuerzas antidisturbios.
Al menos hay 232 personas detenidas, según fuentes oficiales citadas por los medios locales.
La Unión Europea ha hecho, a través de un comunicado, un llamamiento al diálogo y a la búsqueda de una solución entre las partes. "El derecho al ejercicio de la libertad de reunión y manifestación de forma pacífica de acuerdo con la ley es un derecho universal y fundamental de todos", ha añadido en su cuenta oficial de Twitter la portavoz de la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini.