El embajador ruso ante la Unión Europea, Vladimir Chizhov, organiza una ceremonia para dar la bienvenida a las diez selecciones nacionales que representarán a la Unión Europea.
En la recta final de los preparativos para el mundial de fútbol, Moscú se esfuerza por mostrar su cara más amable.
El embajador de Rusia ante la Unión Europea ha organizado una ceremonia para dar la bienvenida a los diez equipos nacionales que representarán a la Unión Europea.
"No se trata únicamente de una fiesta del deporte, es también una celebración de la comprensión y la amistad entre los pueblos", explica el embajador Vladimir Chizhov. "Ese es el fin que perseguimos al organizar este campeonato en nuestro territorio".
Pero Euronews ha querido saber si sus vecinos deben preocuparse, si podría ocurrir algo parecido a lo que ocurrió después de los Juegos Olímpicos de Sochi con Crimea.
"Si alguien quiere desestabilizar la situación, tal y como ocurrió después de Sochi", responde Chizhov, "ciertamente trataremos de evitarlo".
Apenas unos días después de la ceremonia de clausura de los Juegos de Invierno de 2014, los primeros "soldados no identificados" aparecieron en la península de Crimea y apenas un mes después, Rusia se había anexionado el territorio.