Trece británicos que residían en el extranjero habían solicitado que se anulara la activación del Brexit alegando que se les había denegado el derecho a votar en el referéndum
El Brexit seguirá su curso, después de que el Tribunal de Justicia europeo haya rechazado como inadmisible una demanda presentada por trece ciudadanos británicos.
Los demandantes alegaban que se les había denegado el derecho a votar en el referéndum de 2016 porque residían en el extranjero desde hacía más de quince años. Y por ello solicitaban que se suspendiera la activación del artículo 50.
El Tribunal alega que los demandantes "yerran al alegar que se ven directamente afectados en lo tocante, en particular, a su condición de ciudadanos de la Unión". Reconoce que su situación jurídica "puede verse afectada por la salida de Reino Unido", pero considera que el impacto sólo podrá evaluarse al término de las negociaciones.