Armas y vehículos confiscados se meten en un tren que irá desde Moscú hasta Vladivostok.
Son armas y vehículos confiscados en la Guerra de Siria. Se exhibieron en Moscú, como parte de una campaña militar de relaciones públicas, justo antes de que fueran puestos en un tren que viaja de la capital de Rusia a Vladivostok.
La iniciativa partió del mismo Vladimir Putin, quien quiere mostrar al pueblo ruso lo importante que es ayudar a Bashar Al Assad.
"Todos los objetos expuestos son reales, en los de mayor tamaño incluso ponía donde habían sido cargados", dice el coronel Serobaba Dmitry.
En la página web del Ministerio de Defensa se puede ver el mapa interactivo de la ruta del tren. Los guías de la campaña participaron en la operación militar en Siria.
El tren recorrerá más de 28 mil kilómetros. La campaña subraya que los países miembros de la OTAN fabricaron muchas armas en Europa.
Hay 500 muestras de vehículos blindados capturados, equipos de ingeniería, artillería pesada, así como armas de fuego y artefactos explosivos... un equipo que parece impresionar.
Quienes se acercaron a la estación moscovita de Kazansky parecen estar orgullosos de lo que han visto. No todos aceptaron responder a las preguntas de la prensa extranjera. Los que sí accedieron, apoyaron totalmente la idea de que los rusos luchen en Siria.
"Vemos en la tecnología que se ha luchado contra nosotros con armas realmente serias, estamos contentos de que estemos ganando con honor y dignidad".
"Siria es otro ejemplo de cómo nuestro Estado ayuda a los Estados amigos".
En cada una de sus paradas, el tren también servirá como punto móvil de reclutamiento para el Ejército.