Francia: Decathlon no venderá su "hiyab deportivo" luego de las críticas masivas

"Pero es hora de pedir calma y moderación sobre el tema: los insultos y las amenazas verbales o físicas no tienen cabida. Le pedimos que mantenga una forma respetuosa en sus intercambios con nuestros equipos".
Así la cuenta oficial de Decathon en Francia pedía un poco de mesura luego de un largo día de polémica por su decisión de comercializar el hiyab en el país galo.
Durante la noche del martes 26 de febrero, la misma página anunció que el producto no se presentaría en las estanterías con el objetivo de "encontrar una situación calmada".
Xavier Rivoire, Director de Comunicación de la marca deportiva, explicó por la tarde en el medio de comunicación francés RTL que Decathlon estaba tomando esta decisión "con toda la responsabilidad de no comercializar este producto en Francia en este momento".
"El deseo intangible de Decathlon es precisamente hacer que el deporte sea accesible a todos. Y esta emancipación a través del movimiento, a través de la práctica de la actividad física, la hemos ofrecido a estas deportistas marroquíes", añadió Xavier Rivoire en RTL.
El "hijab" deportivo, que ya está en el mercado marroquí, iba a llegar a Francia en las próximas semanas.
La definición de libertad comprometida en la polémica
Tal producto "no está prohibido por la ley", dijo la ministra de Salud Agnes Buzyn al mismo medio, pero "es una visión de las mujeres que no comparto". Buzyn admite que "hubiera preferido que una marca francesa no promocionara el velo".
Para Aurore Bergé, portavoz del partido oficialista francés La République en Marche, "el deporte te emancipa, no te somete. Mi elección como mujer y como ciudadana será dejar de confiar en una marca que rompe con nuestros valores. Los que toleran a las mujeres en el espacio público sólo cuando se esconden no son amantes de la libertad".
Otros van más allá y piden un "boicot" a Decathlon, como la presidente del Grupo Socialista y Afines de la Asamblea Nacional, Valérie Rabaul.
En contraste, Angélique Thibault, responsable del diseño del hiyab deportivo, expresó que estaba "impulsada por el deseo de que todas las mujeres pudieran correr en todos los distritos, en todas las ciudades, en todos los países, independientemente de su nivel deportivo, de su estado físico, de su morfología y de su presupuesto". Independientemente de su cultura."
Por otro lado, la firma deportiva Nike comercializa el mismo producto en Francia con total normalidad a 30 euros y en diferentes colores.