Es la primera vez en Alemania que un extranjero conquista un consistorio.
Es nuevo en política pero ya rompe moldes: Claus Ruhe Madsen se ha convertido en el primer extranjero al frente de una gran ciudad alemana. El 16 de junio, tomó las riendas de la ciudad de Rostock.
El empresario de 46 años nació en Copenhague y llegó a Alemania a mediados de los 90. Fue presidente de la Cámara de Industria y Comercio de 2013 a 2019 y hasta ahora, dirigía su propia empresa de muebles. Pero tras la elección ha renunciado a todo para como reza su lema electoral "mover Rostock": "Estoy muy satisfecho, pero ahora también es importante que unamos a todos los habitantes de la ciudad, que estemos de acuerdo en que todos estemos en el mismo barco".
Madsen no pertenece a ningún partido político, pero contó con el apoyo electoral de la CDU y el FDP. El danés partía ya como favorito, y una de las razones es precisamente la simpatía que suscita su origen danés.
Madsen quiere modernizar Rostock con la renovación de la zona portuaria. Mejorar el transporte público y habilitar más carriles para bicicletas son otras de sus prioridades.