Las Autoridades sanitarias de la República Democrática del Congo (RDC) van a vacunar a la población de las zonas afectadas con un compuesto experimental elaborado por Johnson & Johnson que ya se utiliza en países como Uganda o Guinea.
Una segunda vacuna para contener el segundo brote de ébola más mortífero de la historia. Las Autoridades sanitarias de la República Democrática del Congo (RDC) van a vacunar a la población de las zonas afectadas con un compuesto experimental elaborado por Johnson & Johnson que ya se utiliza en países como Uganda o Guinea.
Este tratamiento se suma al que ya se utiliza desde que se detectó el brote en el este del país hace más de un año y que fabrica la farmacéutica Merck.
A pesar de que algunos sectores de la población congoleña son contrarios a las vacunas y mucho más a los tratamientos experimentales, las autoridades han decidido actuar debido a la gravedad del brote, que ya se ha cobrado la vida de más de 2.100 personas y sigue fuera de control.