El presidente iraní, Hassan Rohaní, denunció un "complot interno" en el país.
PUBLICIDADEl régimen iraní clama victoria tras la crisis social que ha estallado en el país. Después de cinco días de violentas protestas, el líder supremo Alí Jamenei aseguró que el país frenó al "enemigo" en lo que consideró como una "guerra política." Asimismo, el ayatolá afirmó que los tumultos están relacionados con un problema de seguridad, no del pueblo. Por su parte, el presidente Hassan Rohaní denunció un "complot interno" y aseguró que las protestas han finalizado.
"Los rebeldes estaban organizados y armados, y seguían precisamente un esquema conspirado por las fuerzas reaccionarias de la región" -denunció Rohaní- "así como los sionistas y los estadounidenses. Considero esto como otra gran victoria para la nación iraní."
De manera paralela, cientos de personas salieron a defender al régimen de Rohaní, al grito de "Muerte a América", en referencia a Estados Unidos. Precisamente las sanciones impuestas por Washington tras su retirada del acuerdo nuclear iraní han agravado la situación economíca del país.
Las manifestaciones, motivadas por la subida de la gasolina en un 50%, comenzaron el pasado viernes y se extendieron por todo el país. Las autoridades iraníes han informado de cinco muertos, cifras que contrastan con las decenas evocadas por el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, y el centenar denunciado por Amnistía Internacional.