Uno de los presuntos responsables y principal ginecólogo del país, Abramyan, ha quedado en libertad pocos días después de haber sido detenido. La red de venta ilegal de bebés se cree que lleva varios años funcionando.
El drama de los bebes robados se intensifica en Armenia. Uno de los presuntos responsables y principal ginecólogo del país, Abramyan, ha quedado en libertad pocos días después de haber sido detenido. La red de venta ilegal de bebés se cree que lleva varios años funcionando. Hace casi dos décadas madres como Syuzan Patvakanyan tenían que renunciar a sus hijos. Ella con 16 años mantuvo relaciones consentidas con un chico de 21 años. Los médicos la coaccionaron con denunciar al padre si no les daba a su hija.
Syuzan Patvakanyan apunta: "Di a luz a una niña sana en el centro médico de Armenia. Me vi obligada a entregar a mi hija, porque me aseguraban que estaba enferma y tenía problemas de salud. Me dieron una hoja de papel en blanco y me obligaron a escribir que renunciaba a la niña".
Cuando regresó a la sala de maternidad tres días después para llevarla a casa, Stella ya no estaba allí. Los médicos afirmaron que había sido enviada a un orfanato de la segunda ciudad más grande del país, Gyumri. Pero la madre adolescente no consiguió localizarla allí. Se dió cuenta de que su hija había sido vendida. Es una de las decenas de víctimas de robos de bebes que ahora son objeto de una investigación oficial. Según el abogado de la víctima, Marat Kostanyan, esta red es una " mafia que ha transformado Armenia en una incubadora de bebés. Un hecho terrible", destaca.
La liberación del principal responsable de los robos ha indignado a la opinión pública. Según el abogado del principal acusado, Abramyan, su cliente sí que reconoce haber ayudado a Stella, pero que las acusaciones son “infundadas y absurdas”. Justifica que tras 20 años no se puede acordar de todos los nacimientos en los que ha participado.