Moscú sigue los pasos de Tokio con una cafetería que pone a estos mamíferos a disposición del cliente durante una hora por cerca de cinco euros.
En Moscú acariciar a un erizo está al alcance de cualquiera...O por lo menos al de los clientes de "Ejeminutka", una cafetería donde estas criaturas nocturnas, generalmente tímidas, están a disposición de los clientes durante una hora por cinco euros.
Tatyana Denegina es la directora del establecimiento que abrió en noviembre pasado: "Tienen personalidades absolutamente diferentes, cada uno tiene su nombre, sus peculiaridades en cuanto al color y al tamaño, etc. Si pones juntos a los veinticuatro que tenemos ves que son muy diferentes. Cada erizo tiene de tres a cuatro días libres cada semana".
Antes de interactuar con los erizos, cada visitante recibe instrucciones detalladas; por ejemplo, no les gusta que les toquen la cabeza, donde tienen las terminaciones nerviosas, y son muy sensibles a los olores, por lo que los clientes deben lavarse antes las manos. Viven en terrarios especiales. Las luces cálidas y las bolsas de lana ayiudan a mantener su temperatura corporal.
Los animales se alimentan principalmente de insectos vivos -cucarachas y grillos-. Para que hagan ejercicio les suministran ruedas como estas.
La idea de las cafeterías con erizos surgida en Japón, ha sido muy criticada por organizaciones de defensa de los animales.