Grecia y Turquía vuelven a chocar por las aguas territoriales. El envío de un barco turco en busca de hidrocarburos en aguas disputadas vuelve a poner a Grecia en pie de guerra.
PUBLICIDADGrecia y Turquía siguen en su escalada de tensión en el Mediterráneo oriental.
De nuevo una disputa por aguas territoriales. Atenas ha vuelto a acusar a Ankara de haber incursionado en su territorio con barcos de búsqueda de hidrocarburos del sistema Navtex. Ankara niega que haya violado la soberanía helena.
Turquía anunció el martes que enviaría navíos al sur de tres islas griegas, a aguas disputadas por ambos países, para llevar a cabo estudios sísmicos hasta el 2 de agosto. Estas exploraciones, necesarias para una futura perforación en la zona lo que levanta ampollas tanto en Grecia como en Chipre.
"El anuncio de Turquía de que enviaría este ba rco para una exploración sísimica en el Mediterráneo oriental no ayuda y manda un mensaje erróneo", subraya la portavoz de la Comisión Europea Massrali Nabila.
Gobierno griego busca el apoyo de sus socios de la UE en caso de tener que pedir sanciones. El ministro de Exteriores alemán, Heiko Maas, visitó Atenas el martes y mandó un mensaje de apoyo a la posición griega.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha afirmado por su parte que no pedirá "permiso a nadie, ni para investigar ni para perforar", lo que ha puesto a las Fuerzas Armadas griegas de nuevo en máxima alerta.
La canciller Angela Merkel habría llamado a ambos líderes para tratar de desescalar la situación. Y esto al parecer es el segundo intento de desescalada después de que el Departamento de Estado pidiera suspender sus actividades en las aguas disputadas.
Las próximas 48 horas son cruciales para la región y su estabilidad. El viernes tendrá lugar la primera ceremonia en Santa Sofía como mezquita desde que fuera transformada en museo en 1931.
La decisión de Erdogan de volver a hacerla templo musulmán es considerada una provocación por Grecia.