Esperanza y prudencia ante la vacuna de Pfizer y BioNTech

Con esperanza y con prudencia. Así ha recibido el mundo el anuncio de la farmacéutica estadounidense Pfizer y su socia alemana BioNTech de que su vacuna contra la COVID-19 tiene una eficacia superior al 90%.
La Organización Mundial de la Salud ha aplaudido a "todos los científicos del mundo que están desarrollando nuevas herramientas seguras y eficaces para vencer a la COVID-19".
El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, para quien la pandemia es su prioridad número uno, ha felicitado a "las mujeres y hombres brillantes que han ayudado a producir este gran avance y nos dan un motivo de esperanza".
Aunque sabe que el camino es largo. "Está claro que esta vacuna, incluso si se aprueba, no estará ampliamente disponible en los próximos meses. El desafío que tenemos ante nosotros en este momento, sigue siendo inmenso y está creciendo", ha dicho Biden.
El todavía presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha calificado el anuncio de Pfizer de gran noticia, destacando el empujón que ha dado a las bolsas.
En Europa, el primer ministro británico, Boris Johnson, se ha mostrado prudente y ha instado a la gente a la no bajar la guardia:"No podemos confiar en esta noticia como una solución. Y el mayor error que podríamos cometer ahora sería aflojar nuestra determinación en un momento crítico".
Con entusiasmo ha recibido la noticia la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. "¡La ciencia europea funciona!", ha dicho, anunciando la próxima firma de un contrato de la Comisión con Pfizer y BioNTech, por hasta 300 millones de dosis.
Ambas farmacéuticas han dicho que esperan poder proporcionar 50 millones de dosis este mismo 2020 y hasta 1.300 millones en 2021. Pero antes, la vacuna debe ser aprobada.