Georgia | La tensión se dispara tras la detención del líder opositor Nika Melia. La oposición, que se ha manifestado en Tiflis, anuncia una gran 'Marcha por la libertad'. La Unión Europea llama a la 'contención'
PUBLICIDAD**La detención del líder opositor Nikanor Melia ha sido como una chispa en el polvorín de la crisis política en Georgia. Cientos de personas se han congregado ante la sede del Gobierno y después ante el Parlamento. Los manifestantes han convocado para el sábado una 'Marcha por la Libertad'. **
Nikanor (Nika) Melia, líder del Movimiento Nacional Unido, fue detenido este martes por la mañana por efectivos antidisturbios en la sede de su partido, donde llevaba una semana atrincherado. Los agentes emplearon gases lacrimógenos y detuvieron a 21 personas que intentaban impedir su apresamiento.
"Esto es un ataque y una agresión a la democracia. Nosotros, en la oposición, vamos a mantenernos unidos para luchar por nuestra libertad y democracia", clama la diputada opositora Elene Khoshtaria.
La Unión Europea llama a la 'contención' de todas las fuerzas en Georgia
La embajada de Estados Unidos en el país ha expresado su "profunda preocupación" por esta detención. Unión Europea ha hecho un llamamiento a la "contención".
"Instamos a todas las partes a que muestren la máxima moderación y responsabilidad para evitar una mayor escalada, por el bien del país y del pueblo", pidió Peter Stano, portavoz de la Comisión Europea.
Dimisión del primer ministro, boicot parlamentario de la oposición...
Nika Melia está acusado de liderar el asalto al Parlamento de hace dos años. El pasado día 16 le retiraron la inmunidad parlamentaria, señal de que su detención era inminente. Para protestar por la medida, el primer ministro Georgui Gajaria, dimitió.
En su lugar, como nuevo jefe de Gobierno, el Parlamento, boicoteado por la oposición, eligió este lunes al exministro de Defensa, Irakli Garibachvili, conocido por su postura intransigente frente a la oposición. De hecho, en su discurso de toma de posesión dijo que restaurará el orden constitucional, calificó al partido opositor de fuerza destructiva y anunció que Melia "no podría esconderse".
En el Parlamento de Georgia, de los 60 diputados de la oposición elegidos en las elecciones de octubre, solo seis ocupan el escaño. El resto boicotea la asamblea porque considera que los comicios fueron fraudulentos. En ese contexto, la detención de Melia hace temer un agravamiento de la tensión en el país.