Por Joan Faus
BARCELONA, 29 jun - El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, se reunirá el martes por primera vez con el nuevo jefe independentista de la región de Cataluña, en un momento en el que el Ejecutivo central está tratando de mejorar las relaciones tras el indulto a nueve dirigentes separatistas encarcelados.
Es probable que ambos discutan una fecha para reanudar las negociaciones sobre el conflicto político de la región.
El jefe del Gobierno catalán, Pere Aragonès, que asumió el cargo el mes pasado, ha dicho que sus principales peticiones en la reunión en Madrid serán un referéndum oficial sobre la independencia y una amnistía para los más de 3.000 separatistas investigados judicialmente.
Sánchez, que se opone a la independencia, ha descartado ambas demandas.
Un referéndum no autorizado sobre la ruptura en 2017 llevó a una efímera declaración de independencia y a la peor crisis política de España en décadas. Los dirigentes separatistas fueron condenados a largas penas de prisión acusados de diversos delitos.
Sánchez los indultó la semana pasada, argumentando que se trata de un gesto de buena voluntad para poner en marcha las negociaciones sobre la cuestión catalana.
Sin embargo, el Tribunal de Cuentas español solicita la devolución de unos 5,4 millones de euros a 40 exresponsables catalanes por su presunto papel en la promoción del movimiento independentista de Cataluña en el extranjero, incluidos algunos dirigentes indultados, según una información publicada por varios periódicos el martes.
El tribunal no se ha pronunciado sobre la posible malversación de fondos públicos por parte de ellos, pero la notificación (denominada Acta de Liquidación Provisional) implica que tienen que depositar la cantidad exigida, según las informaciones. Si no pudieran hacerlo, se les embargarían sus bienes.
Un portavoz del tribunal no respondió a las solicitudes de comentarios.
El tribunal solicitó 1,9 millones de euros a Oriol Junqueras, el más destacado de los políticos liberados por su papel como vicepresidente de Cataluña hasta 2017, según los medios.
Junqueras, presidente del partido de Aragonès, Esquerra Republicana de Catalunya, dijo el lunes a Reuters que el tribunal está politizado y que su investigación demuestra que "el fin de la represión está muy lejos".
El dirigente catalán dijo que era imprescindible aprobar una amnistía relacionada con los sucesos de 2017.
El tribunal también solicitó 1,9 millones de euros al expresidente regional catalán Carles Puigdemont, que huyó a Bélgica tras la declaración de independencia.