BRUSELAS, 15 nov - El secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Jens Stoltenberg, advirtió el lunes a Rusia que los aliados occidentales darán su apoyo a Ucrania ante la inusual gran concentración de tropas rusas en sus fronteras.
Subrayando que lo más importante en estos momentos es evitar que la situación se salga fuera de control, Stoltenberg urgió a Rusia a que sea transparente en lo que respecta a sus actividades militares, a fin de reducir las tensiones y prevenir cualquier posible escalada del conflicto.
"Tenemos que ser claros de miras, necesitamos ser realistas sobre los retos a los que nos enfrentamos. Y lo que vemos es una amplia y significativa escalada militar rusa", dijo Stoltenberg en una conferencia de prensa celebrada junto al ministro de Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, celebrada en Bruselas.
Stoltenberg dijo que no quiere especular sobre las posibles intenciones de Rusia, si bien añadió: "vemos una concentración inusual de tropas, y sabemos que Rusia se ha mostrado dispuesta a recurrir este tipo de potencia militar para llevar a cabo acciones de agresión contra Ucrania en ocasiones anteriores".
Los movimientos de tropas rusas en los últimos días han disparado los temores a un posible ataque. Moscú ha descartado esta posibilidad, tildando las especulaciones al respecto de incendiarias y quejándose de la creciente actividad en la región de los aliados de la OTAN.
Rusia se anexionó la península ucraniana de Crimea en 2014, tras lo cual reclama sus aguas territoriales como rusas, a pesar de que la mayoría de los países continúan reconociendo la soberanía ucraniana de la península.
El mismo año, grupos separatistas apoyados por Moscú tomaron el control de la región de Dombás, en el este de Ucrania, produciéndose aún a día de hoy bajas mortales entre los soldados a ambos bandos del conflicto en la zona.
El aumento de las tropas rusas en la frontera, que Ucrania estima alcanza ahora los 100.000 soldados, es peligroso, dijo Stoltenberg, ya que reduce el tiempo de respuesta en caso de que Rusia decidiera "llevar a cabo una agresión militar contra Ucrania".
"Esto en parte se traduce en fuerzas cerca de la frontera entre Rusia y Ucrania, pero también en tropas y unidades militares en el interior de Ucrania, ya que están en Crimea, que fue anexionada ilegalmente, a lo que también sumamos fuerzas militantes, los separatistas de Dombás, que también es parte de Ucrania, apoyados y ayudados por Rusia", dijo.
A la petición de describir el estado del proceso de despliegue de unidades militares en la frontera con Ucrania, una fuente de la OTAN dijo: "equipo de grandes dimensiones como tanques, artillería autopropulsada y vehículos de combate de infantería están siendo desplazados durante la noche para evitar ser delatados por fotografías en redes sociales, igual que se hizo durante el aumento de tropas rusas en primavera".
"Puede acontecer cualquier cosa", dijo a los periodistas también el lunes el ministro de Exteriores de Lituania, Gabrielius Landsbergis, antes de una reunión de sus homólogos de la Unión Europea.
Los países occidentales no pueden excluir la posibilidad de un ataque de Rusia contra Ucrania, en un momento en que la atención internacional se centra en la crisis migratoria en Bielorrusia, así como tampoco la de que Moscú establezca una presencia militar permanente en territorio bielorruso, dijo la el ministro lituano.
"No excluiría esa posibilidad", afirmó.