Muchos europeos y personas de diferentes países se ven con la complicada tarea de salir de Rusia. Los precios de los billetes están por las nubes, es difícil sacar dinero de los cajeros y se encuentran con la escasez de plazas en los aviones.
Después de que se rompieran las relaciones aéreas entre Rusia y Occidente, ciudadanos de todo el mundo tratan de salir del país La embajada española recomienda a quienes quieran salir de Rusia que lo hagan lo antes posible, a través de Turquía y otras naciones con los que aún hay conexiones aéreas. Algunos como la patinadora Sara Hurtado ya han abandonado su vida en Moscú.
"El viajar a cualquier cosa que necesitemos se nos complica y más que nada por la sensación de seguridad, creo que vivir en esta ansiedad diaria no es saludable para nadie"
Un amargo final para ella que se ha acordado de quienes no tendrán opción de escapar si todo empeora.
"Ahora mismo se tiene en la cabeza que Rusia es el enemigo. No se piensa que también hay mucha gente rusa que no quiere esto y yo he tenido el placer de conocerlos y compartir mi vida con ellos"
Otros españoles como el abogado español, Jorge Enrique Roja, están preocupados porque su visa expira. Cree que Europa debía haber dejado más margen tiempo.
"Creo que las autoridades europeas se han precipitado en la decisión de cerrar el espacio aéreo sin antes hacer un cordón humanitario y evacuar a sus ciudadanos europeos", señala Jorge Enrique Rojas.
Los europeos que se encuentran en Rusia se enfrentan a las mismas dificultades para sacar el dinero de los cajeros que los ciudadanos rusos, empresas para las que trabajan que tienen dificultades para continuar, los billetes de avión por las nubes, la escasez de plazas o la difícil decisión de asumir que no verán a sus familias en España durante un tiempo.