Por Joan Faus
MADRID, 13 dic - Las autoridades marroquíes y españolas actuaron con fuerza "ilegítima y letal" durante un intento de cruce multitudinario de la frontera por un grupo de migrantes en junio, en el que murieron al menos 23 personas, afirmó Amnistía Internacional el martes en un informe basado en testimonios de testigos presenciales, imágenes de vídeo e imágenes por satélite.
Amnistía Internacional (AI) criticó además que las "investigaciones estancadas e inadecuadas (...) denotan encubrimiento".
La gestión del intento masivo de cruzar la frontera el 24 de junio entre Marruecos y Melilla, enclave norteafricano de España, sigue siendo un quebradero de cabeza político para el Gobierno español.
Ha sido duramente criticada por el defensor del Pueblo español y por expertos en derechos humanos de la ONU.
El ministro del Interior español ha sido interpelado repetidamente en el Parlamento y ha recibido peticiones de dimisión de partidos de la oposición.
Marruecos ha afirmado que 23 personas murieron en el incidente, mientras que las autoridades españolas han sostenido que no se produjeron muertes en su territorio. Amnistía Internacional afirmó que al menos 37 personas murieron y otras 77 permanecen desaparecidas.
El informe afirma que "muchas de las personas heridas siguieron recibiendo golpes y patadas cuando ya estaban en el suelo, semiinconscientes, sin poder responder, o respirando con dificultad".
También denuncia la falta de información sobre la identidad de los fallecidos y sobre la suerte de los desaparecidos.
Preguntado por estas acusaciones, el Ministerio del Interior español reiteró que la policía actuó "con proporcionalidad y legalidad, con un respeto absoluto a los derechos humanos", y afirmó que las acusaciones de que España incumplió su deber de asistencia son falsas.
Las autoridades marroquíes declinaron hacer comentarios.
"Ni las autoridades marroquíes ni las española prestaron asistencia médica rápida y adecuada a las personas heridas, e incluso negaron el acceso a la zona al equipo de una ambulancia de Cruz Roja, mientras decenas de personas quedaban desatendidas a pleno sol durante al menos ocho horas", afirmó Amnistía Internacional.
Un entrevistado dijo que la policía española obligó a los heridos a regresar a Marruecos cruzando la frontera. Un ciudadano sudanés de 17 años dijo que a las personas detenidas por la policía marroquí "les golpearon con martillos en la cabeza hasta que fallecieron" en la cárcel.