Durante los últimos 12 meses, el Gobierno británico ha llevado a cabo varios intentos a fin de atajar esta crisis.
Casi 46.000 migrantes—45.756 según cifras oficiales del Gobierno británico—cruzaron el Canal de la Mancha en 2022, frente a los 28.500 del año anterior.
Las cifras oficiales indican que el número de personas que cruzan ilegalmente de Francia a Reino Unido se ha multiplicado por 150 en los últimos cuatro años.
Entre las tendencias más preocupantes, sin duda, la protagonizada por los contrabandistas, que llevan cada vez más personas a bordo, en botes cada vez más grandes, con consecuencias, en muchas ocasiones, mortales.
En 2020, la media de personas a bordo de cada lancha neumática era de 13. El año pasado esa cifra aumentó hasta a 45 personas por embarcación.
El último día del pasado año en que se interceptaron botes con migrantes tratando de cruzar el canal fue el día de Navidad, el pasado 25 de diciembre, cuando 90 personas se embarcaron en dos botes desde Francia en dirección a este país.
Según esta información, durante los últimos seis días de 2022, cuando las condiciones meteorológicas fueron adversas, ya no se registraron más travesías de este tipo.
Durante los últimos 12 meses, el Gobierno británico ha llevado a cabo varios intentos a fin de atajar esta crisis. El primer ministro británico, Rishi Sunak, ha prometido implementar nueva legislación en 2023 con el objetivo de lograr que "quede claro, sin ambigüedades, que si entras en el Reino Unido de manera ilegal, no deberías poder quedarte aquí".
Entre las varias medidas para erradicar estas entradas ilegales por el canal de la Mancha y solucionar los retrasos en las solicitudes de asilo, el líder tory se ha comprometido a dejar de alojar a los solicitantes de asilo en hoteles y optar por alojamientos vacíos en recintos vacacionales, antiguas residencias de estudiantes y edificios militares en desuso.