MADRID, 12 ene -El Tribunal Supremo de España retiró el jueves los cargos de sedición contra el líder del intento fallido de independencia de Cataluña, Carles Puigdemont, después de que una reforma del código penal del país aboliera este delito.
Puigdemont, que se ha autoexiliado en Bélgica para evitar ser procesado en España, aún se enfrenta a cargos de desobediencia y malversación que conllevan penas de cárcel de hasta ocho años. La sedición conllevaba una pena máxima de 15 años de cárcel.
Los intentos anteriores de España de extraditar a Puigdemont durante sus estancias en Alemania, Bélgica e Italia han fracasado.
El juez del Tribunal Supremo español Pablo Llarena dijo en un comunicado el jueves que presentaría una nueva solicitud de extradición a las autoridades belgas para que sea juzgado por cargos menores, dependiendo de las sentencias de los tribunales de la UE en cuanto si Puigdemont tiene inmunidad y si la extradición puede solicitarse varias veces.
El abogado de Puigdemont, Gonzalo Boye, afirmó que Llarena tiene un "problema de tipo penal", que dijo "es un problema de derechos fundamentales y es un problema de persecución política".
"Estamos ante una situación muy compleja, porque en el fondo esto es un poco como una situación de Groucho Marx: 'Tengo estos delitos, y si no le gustan tengo estos otros'. Y al final estas cosas son poco serias", añadió Boye, en una referencia a una cita ampliamente atribuida al cómico Groucho Marx.
España modificó su código penal a finales del año pasado para eliminar el delito de sedición, en virtud del cual algunos políticos separatistas fueron condenados a penas de hasta 13 años de prisión después de que el pulso independentista de 2017 en la región desembocara en una crisis constitucional.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que posteriormente indultó a los condenados por los hechos, dijo que la medida debería apaciguar aún más el conflicto político entre Madrid y la rica región nororiental de Cataluña. Los partidos de la oposición dijeron que el objetivo era garantizar a la coalición socialista de Sánchez el apoyo continuado de los partidos independentistas en votaciones parlamentarias reñidas.
Puigdemont ha estado viviendo en un exilio autoimpuesto en Bélgica desde finales de 2017 y es miembro del Parlamento Europeo desde 2019.