Los fiscales del tribunal de Mombasa afirman que llevó a sus seguidores a matarse de hambre con la promesa de encontrarse con Jesús.
El líder de una secta cuyos miembros se mataban de hambre ha comparecido ante un tribunal de Kenia acusado de asesinato y secuestro.
El autoproclamado pastor Paul Mackenzie Nthenge y otras 13 personas están acusados de la muerte de 109 fieles de la Iglesia Internacional de la Buena Nueva.
Los fiscales del tribunal de Mombasa afirman que llevó a sus seguidores a matarse de hambre con la promesa de encontrarse con Jesús. En el bosque donde se descubrieron los cadáveres se sigue buscando a otras víctimas, y el número de muertos aún podría aumentar.