Columnas de tractores bloquean París. Las ocho autopistas principales de acceso a la capital están bloqueadas por una caravana de tractores que amenaza con bloquear París por un período indefinido.
En París, los agricultores franceses tratan de bloquear el acceso al mercado de Rungis, el mercado de productos frescos más grande de Europa.
Mientras los sindicatos agrícolas negocian regulaciones, salarios e impuestos, el Gobierno francés ha advertido que bloquear el mercado de Rungis sería cruzar "líneas rojas". Rungis, que suministra el 60% de los alimentos frescos de París a unos 12 millones de personas.
Agricultores de Francia a las barricadas
Las ocho autopistas principales de acceso a la capital están bloqueadas por una caravana de tractores amenaza con bloquear París por un período indefinido.
Los agricultores aumentan la presión sobre el Gobierno de Francia con el asedio a las instalaciones de la sede olímpica en la ciudad de París.
15.000 policías y gendarmes movilizados
El ministro del Interior, Gérald Darmanin, ha asegurado haber movilizado 15.000 policías y gendarmes para para mantener abiertos los accesos a los aeropuertos de Roissy Charles de Gaulle y de Orly.
"Nos obligan a tener tierras en barbecho, pero se supone que debemos producir más. ¿Cómo se supone que vamos a producir más si tenemos menos espacio para cultivar?", protesta Stéphanie Flament, agricultora de 39 años.
"¡Nos prohíben utilizar ciertas moléculas que ya están autorizadas en España o Italia... Y ellos venden su fruta en Francia! ¿Cómo hacemos?", se lamenta otro agricultor.
El asalto del campo a la ciudad
Las barricadas de tractores que creaban largas colas de automóviles y camiones y los obligaban a desviarse hacia carreteras más pequeñas puso de relieve el abismo de oportunidades económicas y sociales entre la ciudad y el campo en Francia. Los manifestantes dijeron que se sentían ignorados por los ministros del Gobierno.
En Jossigny, cerca del parque temático Disneyland al este de París, los manifestantes bloquearon los seis carriles de la autopista A4.
Estacionaron sus tractores en filas para que formaran lo que parecía una espiga de trigo vista desde el aire. Algunos de los vehículos llevaban carteles que decían "No hay alimentos sin agricultores", "El fin de nosotros significaría hambruna para ustedes" y expresaban enojo con las importaciones de alimentos.