La Convención de Ottawa prohíbe la producción, posesión y transferencia de minas antipersona.
Estonia, Letonia, Lituania y Polonia acordaron retirarse de la Convención de Ottawa, un tratado internacional que prohíbe las minas antipersona, en respuesta a la preocupación por la creciente amenaza militar de Rusia a los Estados limítrofes miembros de la OTAN. La decisión se produce poco después de que los ministros de Defensa de los países bálticos y Polonia recomendaran unánimemente retirarse del tratado.
En una declaración conjunta hecha pública el martes, los ministros de Defensa afirmaron que "creen que en el actual entorno de seguridad es primordial proporcionar a nuestras fuerzas de defensa flexibilidad y libertad de elección para utilizar potencialmente nuevos sistemas de armas y soluciones para reforzar la defensa del vulnerable flanco oriental de la alianza".
La primera ministra de Letonia, Evika Silina, declaró que la semana que viene se presentará un borrador al Parlamento, que debe tomar la decisión final. "Esta decisión dotará a nuestras Fuerzas Armadas Nacionales de capacidades adicionales, sobre cuándo podrán comprar y qué", declaró Silina.
La primera ministra añadió que "Letonia también ha considerado la posibilidad de que podamos producir, ya que esto también se correlaciona con nuestra estrategia industrial militar adoptada hoy". El ministro de Defensa letón, Andris Spruds, dijo que la medida sería un paso crucial para construir juntos la "línea de defensa del Báltico". "Debemos tener la oportunidad de reforzar nuestras capacidades de defensa de seguridad, retirándonos de este Convenio", añadió.
Posibilidad de un efecto dominó
También Lituania resaltó su voluntad de aumentar su producción de explosivos. "Desde el comienzo de la guerra a gran escala en Ucrania se han mantenido conversaciones y discusiones sobre la posibilidad de disponer en nuestro país de los medios necesarios, especialmente para la producción de explosivos", declaró el jefe de la Defensa, Raimundas Vaiksnoras.
El ministro de Defensa de Lituania, Dovile Sakaliene, declaró que la decisión conjunta enviaba una señal clara a los demás, indicando que los Estados "se toman en serio la disuasión y la defensa de las fronteras".
La decisión podría tener un efecto dominó, con más países siguiendo su ejemplo. "No seremos ni el primero ni el último país en abandonar la Convención", declaró el primer ministro de Letonia. Finlandia podría ser el siguiente en retirarse del tratado, tras haber declarado anteriormente que también estaba considerando abandonarlo debido al uso de minas antipersona por parte de Rusia en Ucrania.
Más de 160 países y territorios son signatarios de la Convención de Ottawa, incluida Ucrania, pero con la exclusión de Rusia y Estados Unidos. El tratado de 1997 prohíbe la producción, posesión y transferencia de minas antipersona, que están diseñadas para ocultarse bajo tierra y han matado o mutilado a miles de civiles en todo el mundo, a menudo mucho después de que un conflicto haya llegado a su fin.