El Gobierno culpabiliza a India -con quien mantiene fuertes tensiones regionales- mientras busca a otras posibles personas que ideasen los ataques en Wana e Islamabad, pero no ofrece pruebas al respecto.
La Policía pakistaní está llevando a cabo una importante investigación sobre los autores intelectuales de los atentados del martes en Wana e Islamabad. El Gobierno dice sospechar de India, país con el que mantiene malas relaciones y reivindicaciones territoriales, pero los medios de comunicación sospechan de otras hipótesis.
La seguridad se ha reforzado en las principales ciudades pakistaníes tras los atentados. Las fuerzas de seguridad investigan con ahínco mientras surgen especulaciones sobre quiénes podrían ser los autores.
"El país está en guerra". Así se expresó el ministro de Defensa de Pakistán tras los atentados terroristas del martes. Primero fue atacada una escuela de cadetes en Wana (una pequeña localidad junto a la frontera afgana) y luego, a primera hora de la tarde, un terrorista suicida se inmoló frente a un tribunal en Islamabad, la capital, matando a 12 personas.
Desde entonces, las autoridades han analizado 92 cámaras de seguridad y han recurrido a la inteligencia artificial para localizar al atacante de Islamabad. Otra de las tesis plausibles es que el autor intelectual sea una persona vinculada a los talibanes pakistaníes, quienes colaboran con su matriz afgana, quien haya ideado el atentado.
Las posibilidades de un acuerdo afganopakistaní duradero se resienten
Pakistán y Afganistán firmaron un acuerdo de alto el fuego en Doha a mediados de octubre, tras una serie de enfrentamientos fronterizos en los últimos meses. Los incidentes se han cobrado cada vez más vidas.
Ambos países comparten una gran frontera, muy vigilada tras la toma de poder de los talibanes en 2021. Con la organización profundamente dividida, especialmente desde la toma del poder, es poco probable que este último acuerdo de alto el fuego proporcione una solución duradera a las tensiones fronterizas.
Mientras tanto, también se han recrudecido los combates en la frontera entre Pakistán y la India en la disputada Cachemira. Ambos países se acusan mutuamente de violar repetidamente los frágiles acuerdos de alto el fuego, en la frontera opuesta de la nación pakistaní.