La ex 'consellera' de Emergencias trata de afianzar un relato victimista y desfavorable sobre su exjefe, quien la dejó al frente de la catástrofe de la DANA.
La Salomé Pradas que compareció el 11 de abril ante el juzgado de Catarroja como investigada guarda bastantes similitudes con la que, unos siete meses después, ha concedido su primera entrevista televisiva -en 'Salvados', el programa de 'La Sexta'- sobre su gestión durante la catástrofe de la DANA en la que, ante la incomparecencia de su exjefe, quedó a los mandos. Sin embargo, aunque hubo nuevas dosis de victimismo, también apareció un objetivo extra en sus descargos de responsabilidad: Carlos Mazón.
Tanto frente a la magistrada Nuria Ruiz Tobarra como ante el periodista Fernando González, 'Gonzo', la exconsellera optó por lanzar culpas ante las gestiones de unos -técnicos autonómicos y responsables estatales- y la destacada ausencia de otro. Este último punto (es decir, su posicionamiento público sobre el expresidente) es el que marca la diferencia con las declaraciones de Pradas durante el último año, donde solo se centró en atacar a los cargos del Cecopi que le acompañaron en las horas críticas de la riada.
Pradas, que pidió disculpas a las 229 víctimas valencianas, sumadas a las castellano-manchegas y a las andaluzas, señaló que recibió instrucciones antes de las 14:00 de no molestar al ex 'president' por parte de su exjefe de gabinete y compañero de piso, José Manuel Cuenca: un hecho acreditado por el sumario de la causa.
"¿Cómo no iba a tener que conocer el 'president' de la Generalitat lo que estaba pasando en una comarca de nuestro territorio? Yo por responsabilidad me salté el 'no le llames' o 'comunícame a mí'. Yo soy inconformista y directamente llamo al 'president'", expresó Pradas ante las cámaras.
La ex 'consellera' relató cronológicamente todas las veces que trató de comunicarse con Mazón, cuya cronología y quehaceres en el restaurante El Ventorro desde el mediodía hasta las 19:47, en los peores momentos de la catástrofe climática, centran en estos momentos la conversación pública. También le acusa de mentir en los días posteriores ante los medios sobre una de las claves del día: el tardío envío del sistema de alertas masivo, que podría haber salvado vidas.
— Me armé de valor para decirle por teléfono que quería que dijera la verdad, no por mí, que lo hiciera por las víctimas. Que nos contara qué había hecho ese día y que contara efectivamente que le había informado de cada paso y de cada momento.
— ¿En qué mintió?
— En negar rotundamente que le había informado de que íbamos a enviar el ES-Alert. Por ahí no iba a pasar.
La ex 'consellera' continúa apuntando al jefe operativo del Consorcio de Bomberos, José Miguel Basset, como el principal opositor a enviar el ES-Alert. "Se inicia un debate entre [el subdirector general de Emergencias de la Generalitat, Jorge Suárez] y el señor Basset sobre la idoneidad de enviarlo. Suárez lo tenía claro; yo también: la gran mayoría teníamos claro que se tenía que lanzar, y es cuando Basset dice que cree que puede ser contraproducente mandarlo".
El mensaje se envió, finalmente, a las 20:11. Pradas defiende que no supo nada del ES-Alert hasta minutos antes de las 19:00, cuando Suárez puso encima de la mesa un borrador para lanzarlo ante la posible rotura de la presa de Forata. Este informe descartaba el envío por un posible "efecto estampida".
La entrevistada también volvió a criticar a varios organismos estatales, la Agencia Estatal de Meteorología y la Confederación Hidrográfica del Júcar, a quienes ha acusado de "tener en tiempo real la información de los caudales y no trasladarla". La CHJ defiende, en un informe presentado ante la juez, que es la Generalitat mediante su Centro de Coordinación de Emergencias quien debe contrastar y coordinar toda la información que le llegue por diferentes fuentes.
Pradas también declaró que no notó preocupado a su jefe y que no se enteró de con quién estaba comiendo (con la periodista Maribel Vilaplana), y dónde, hasta el 8 de noviembre, como el resto de la opinión pública. Su único momento de autocrítica, ante las preguntas del periodista, fue no haberle dicho al señor Mazón que acudiese al Cecopi de inmediato. Y añadió: "El mayor error del señor Mazón fue no estar allí". La investiga va a rechazar formalmente este lunes volver a ser interrogada por la juez.