Las autoridades turcas han reforzado sus operaciones de seguridad tras nuevas informaciones de inteligencia que advierten de posibles planes del ISIS para atentar durante las celebraciones de Nochevieja.
Las autoridades turcas han intensificado en los últimos días sus operaciones contra el autodenominado Estado Islámico (ISIS) tras nuevas informaciones de inteligencia que alertan de posibles atentados durante las celebraciones de Nochevieja, especialmente en lugares concurridos como centros comerciales y mercados.
En este contexto, la Fiscalía General de Ankara ha emitido una orden de detención contra 10 sospechosos acusados de financiar al grupo yihadista. La investigación se centra en la estructura financiera del Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL) en la capital turca.
Según informó el martes la Agencia de Noticias Demirören (DHA), la investigación, llevada a cabo por la Oficina de Investigación de Delitos de Terrorismo se apoya en informes de la MASAK (Junta de Investigación de Delitos Financieros) y en el análisis de redes sociales, que permitieron identificar cómo operaba la red en Ankara.
Las autoridades determinaron que los sospechosos enviaban ayuda económica en efectivo a miembros del grupo y a sus familias en zonas de conflicto en Siria. Las transferencias se realizaban a través de cuentas bancarias y se justificaban con conceptos como "llamada a la unidad", "expiación" o "ayuda a las hermanas cautivas".
Tras estos hallazgos, la Subdirección Antiterrorista de la Dirección de Seguridad de Ankara puso en marcha una operación para detener a los implicados por el presunto delito de financiación del terrorismo.
Advertencia por Nochevieja
La preocupación de las fuerzas de seguridad se ha visto reforzada por la filtración de una comunicación interna de la Gendarmería de Ankara, fechada el 19 de diciembre, revelada por el diario 'Cumhuriyet'. En el documento se advierte que el ISIS podría estar planeando acciones de alto impacto durante la Nochevieja.
Según esa correspondencia, que no ha sido desmentida oficialmente, el grupo podría recurrir a ataques armados, atentados suicidas, coches bomba, drones o atropellos deliberados en zonas con gran afluencia de público. El informe insta a extremar las precauciones y señala que estas amenazas buscarían "generar miedo y elevar la moral" del grupo tras el debilitamiento de su capacidad operativa por las operaciones llevadas a cabo en Turquía y en el extranjero.
Detención de un alto cargo del ISIS en el extranjero
En paralelo, la Agencia Anadolu (AA) informó de que la Organización Nacional de Inteligencia de Turquía (MIT) capturó recientemente a Mehmet Gören, ciudadano turco y miembro del ISIS conocido como 'Yahya', en una operación en la región fronteriza entre Afganistán y Pakistán. Posteriormente fue trasladado a Turquía.
Según las autoridades, Gören ocupaba un cargo de responsabilidad en la denominada 'provincia de Jorasán' (ISKP), una rama del ISIS, y habría sido encargado de organizar atentados suicidas. Las fuerzas de seguridad señalan que operaba junto a Özgür Altun, alias 'Abu Yasir Al Turki', detenido previamente y también trasladado a Turquía.
Fuentes de seguridad indicaron que existía información de inteligencia según la cual Gören había acordado llevar a cabo atentados contra civiles en Turquía, Pakistán, Afganistán y Europa.
Antecedentes de ataques del ISIS en Turquía
El ISIS ha perpetrado numerosos atentados mortales en Turquía en la última década. El 10 de octubre de 2015, dos terroristas suicidas atacaron una concentración pacifista en Ankara, causando la muerte de 103 personas.
Posteriormente se supo que las fuerzas de seguridad habían recibido advertencias previas, aunque no se adoptaron medidas suficientes. Los procesos judiciales relacionados siguen abiertos.
En la Nochevieja de 2017, un ataque armado contra la discoteca Reina, en Estambul, dejó 39 muertos. Además, atentados atribuidos al ISIS en lugares como el aeropuerto Atatürk, Suruç y Diyarbakır causaron la muerte de cientos de civiles en esos mismos años.