La prestigiosa Guía Michelin añadió 52 nuevos restaurantes con estrella en Francia, la mayor cifra de la historia. Aunque muchos jóvenes chefs fueron galardonados, las mujeres seguían notablemente ausentes.
PUBLICIDADFrancia sigue siendo la capital gastronómica del mundo, según la prestigiosa guía de restaurantes Michelin, que desveló el lunes su selección 2024 de los mejores restaurantes franceses. La ceremonia tuvo lugar en la ciudad de Tours, en el Valle del Loira, tras las ediciones anteriores celebradas en Estrasburgo y Cognac. Desde la pandemia, la Guía Michelin se ha esforzado por salir de París y ha ido cambiando de ubicación cada año.
La guía también ha hecho un esfuerzo concertado para aumentar su audiencia y atraer a los más jóvenes, centrándose este año en los chefs franceses menores de 40 años. En total, la organización, creada en Francia en 1920, ha distinguido a un total de 639 restaurantes franceses, el mayor número de todos los países del mundo.
Entre los ganadores de este año había más jóvenes chefs que nunca: 52 restaurantes de París y de todo el país obtuvieron su primera estrella Michelin, testimonio de la nueva generación culinaria del país.
Una de las historias más sorprendentes de la noche fue la del joven chef Fabien Ferré, que rompió la tradición al conseguir tres estrellas de una sola vez para su restaurante La Table du Castellet, en el sur de Francia. A sus 35 años, Ferré se ha convertido en el cocinero francés más joven en recibir tres estrellas Michelin, la máxima distinción de la guía.
"No se me dan muy bien los discursos", dijo Ferré al recibir su distinción. "Soy un poco mejor en la cocina. Llegué al Castellet hace 11 años. ¿Habría imaginado alguna vez estar en este escenario ganando el mayor honor?". También obtuvo el máximo honor por primera vez Le Gabriel - La Réserve, del chef Jérôme Banctel, en París, que recibió tres estrellas Michelin en la ceremonia.
¿Dónde están las mujeres?
Sin embargo, aunque el reconocimiento de los jóvenes chefs supuso un soplo de aire fresco para la centenaria institución, las mujeres siguieron estando notablemente ausentes de la prestigiosa lista, conocida por marcar el éxito o el fracaso de los establecimientos de alta cocina.
Sólo seis mujeres figuran entre los nuevos chefs galardonados este año, cada uno con una estrella, y sólo una ha sido premiada en solitario: Eugénie Béziat, jefa de cocina del restaurante insignia del Ritz de París, L'Espadon.
Otras mujeres obtuvieron sus estrellas formando dúos con cocineros: Adeline Lesage, de Nacre, cerca de Burdeos; Emilie Roussey, de Le Moulin de Cambelong, a las afueras de Toulouse; y Florencia Montes, de Onice, en Niza. Y un raro dúo de cocineras, Manon Fleury y Laurène Barjhoux, obtuvo una estrella por su restaurante Datil, en París.
El director internacional de la Guía Michelin, Gwendal Poullennec, señaló la abrumadora mayoría masculina en un discurso previo al anuncio de los nuevos ganadores de tres estrellas:
"¿Dónde están las mujeres? Hay muy pocas mujeres al frente de las cocinas, a pesar de que cada vez son más las que trabajan en ellas. Es una realidad que deploramos. Sé que muchos chefs han puesto en marcha iniciativas firmes para promocionar a mujeres jóvenes con talento. Me alegro mucho por ello y espero que algún día abran sus propios restaurantes".
Tras el discurso de Poullennec se proyectó un vídeo en el que se mostraba a mujeres de la restauración francesa, entre ellas la única chef francesa con tres estrellas, Anne-Sophie Pic.
La Guía Michelin ha ido ampliando su alcance en los últimos años, añadiendo nuevos países a su repertorio y desplegando docenas de misteriosos inspectores que van de incógnito como jueces. En la actualidad, la organización edita guías en más de 25 países, entre ellos Italia, España, Estonia, Alemania, Corea del Sur, Reino Unido y Japón.