Pesca sostenible, empleo y seguridad alimentaria: la asociación entre la UE y Mauritania pretende garantizar una pesca responsable y apoyar a las comunidades locales.
La pesca es uno de los pilares de la economía y la vida cotidiana de Mauritania: representa cerca del 10%delPIB del país y da trabajo a unas 300.000 personas de forma directa o indirecta. El pescado es la principal fuente de proteínas de muchos ciudadanos mauritanos, por lo que el sector es crucial tanto para la subsistencia como para la seguridad alimentaria.
El Acuerdo de Asociación para la Pesca Sostenible (APPS) entre la Unión Europea y Mauritania, que se renovó en 2021 por seis años, establece las condiciones para los buques europeos que faenan en aguas mauritanas. Dicho acuerdo está diseñado para hacer frente a la sobrepesca y proteger los recursos marinos, al tiempo que apoya la economía de Mauritania.
El Embajador de la UE en Mauritania, Joaquín Tasso Vilallonga, habló con 'Ocean' en el nuevo centro de investigación IMROP de Nuakchot, financiado por la UE. Afirmó que la pesca es "un sector muy importante de la economía mauritana" y destacó su papel como creadora de empleo y fuente clave de nutrición. Señaló que el objetivo principal de la asociación es garantizar una gestión sostenible de los ricos recursos pesqueros de Mauritania: "Esto significa, en primer lugar, que seguimos garantizando la alimentación y la nutrición del país; en segundo lugar, que permitimos que Mauritania exporte un recurso y obtener ingresos; y, por último, que respetamos la capacidad de reproducción y el mantenimiento de estas poblaciones de peces y aseguramos un uso sostenible respetuoso del medio marino".
Entre los puntos clave del acuerdo se encuentran:
Cuotas basadas en aspectos científicos: Los buques de la UE solo pueden capturar excedentes de poblaciones, según determinen las evaluaciones científicas conjuntas. Si los científicos advierten de que una especie está en peligro, debe interrumpirse su pesca.
Contribuciones económicas: La UE paga a Mauritania 57,5 millones de euros anuales, a los que se añadirán 3,3 millones destinados a apoyar a las comunidades pesqueras locales, la investigación y las infraestructuras.
Seguridad alimentaria: Parte de las capturas (en concreto, el 2% de los peces pelágicos) se destina a la seguridad alimentaria local y se distribuye en las comunidades locales, con lo que se contribuye a garantizar a los ciudadanos mauritanos el acceso a proteínas asequibles.
Medidas de transparencia: El acuerdo exige que se hagan públicos todos los contratos de pesca extranjeros con el fin de garantizar la equidad y combatir la pesca ilegal.
El acuerdo entre la UE y Mauritania se considera un esfuerzo por equilibrar los intereses económicos con la protección del medio ambiente. Al vincular el acceso al asesoramiento científico y la inversión en infraestructuras locales, el acuerdo pretende garantizar que tanto la industria pesquera de Mauritania como sus ecosistemas marinos se mantengan sanos para las generaciones venideras.