El tribunal considera que Hungría ha incumplido su obligación de garantizar un acceso efectivo a la protección internacional ya que los nacionales de terceros países se ven en la "casi en la imposibilidad" de pedir asilo.
El Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha condenado a Hungría por violar los derechos de los demandantes de asilo.
Afirma que los migrantes que llegan a la frontera serbo-húngara se encuentran en la "casi imposibilidad" de pedir asilo.
Budapest había alegado que la avalancha migratoria de 2015 justificaba que se suspendiera la aplicación de legislación comunitaria. Un argumento que ha sido rechazado por el Tribunal.
La Comisión Europea confía en que esta sentencia contribuirá a que Budapest cambie de política. Su portavoz, Adalbert Jahnz, ha explicado que escribirán una carta a las autoridades húngaras para preguntar "qué medidas piensan adoptar para asegurarse de que a partir de ahora cumplen plenamente".
La ministra de Justicia húngara, Judit Varga, ha respondido con un comunicado desafiante. "Continuaremos protegiendo las fronteras de Hungría y Europa, y haremos todo lo posible para evitar la aparición de corredores internacionales de migrantes".
Este no es el primer contencioso entre Bruselas y Budapest a causa de la política migratoria. Ya en mayo, la Justicia europea dictaminó que los solicitantes de asilo eran retenidos en condiciones similares a las de una prisión.