El SPD de Scholz venció por poco al partido de extrema derecha Alternativa para Alemania.
A medida que las aguas vuelven a su cauce en el estado de Brandeburgo, en Alemania Oriental, tras las elecciones del domingo, las cosas se van viendo más claras.
En primer lugar, la tasa de participación electoral del 73% fue la más alta en este estado federado desde la reunificación alemana hace 30 años. En segundo lugar, tanto los Liberales como los Verdes necesitan mantener una conversación sobre el futuro del Gobierno de coalición federal, después de que ambos partidos no lograran superar el umbral del 5% necesario para ganar un escaño en el Parlamento estatal.
Y, por último, aunque estos resultados fueron una victoria para el partido socialdemócrata de Scholz, el SPD, el partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD) obtuvo una segunda minoría de bloqueo, al igual que en el estado de Turingia, en Alemania Oriental, a principios de este mes. Esto significa que AfD tiene ahora el poder de elegir jueces constitucionales en estos estados federados.
Según los resultados finales, publicados el domingo por la noche por la administración electoral estatal, el SPD obtuvo el 30,9% de los votos, mientras que AfD quedó en segundo lugar con el 29,2%.
La Alianza Sahra Wagenknecht (BSW), un nuevo movimiento de izquierda, quedó en tercer lugar con un 13,5%, mientras que los democristianos de centroderecha obtuvieron un 12,1%.
Los socialdemócratas han gobernado el estado de Brandeburgo desde 1990 y una derrota en ese estado habría sido un gran revés para Scholz, que tiene su distrito electoral en la capital del estado, Potsdam.