La protesta unió a la oposición, incluidos los liberales Eslovaquia Progresista, los proempresariales Libertad y Solidaridad y los democristianos conservadores, que afirman que Fico es una amenaza para la democracia.
Miles de manifestantes se han reunido en la capital eslovaca en el 35º aniversario del inicio de la Revolución de Terciopelo, que puso fin a décadas de régimen comunista en la antigua Checoslovaquia, para oponerse a las políticas del primer ministro populista Robert Fico. La protesta unió a la oposición, incluidos los liberales Eslovaquia Progresista, los proempresariales Libertad y Solidaridad y los conservadores democristianos, que afirman que Fico es una amenaza para la democracia.
El Gobierno nos quita la libertad y la democracia", rezaba una pancarta entre la multitud. "Eslovaquia es y será parte de la civilización occidental", dijo a la multitud en el centro de Bratislava el veterano político conservador Frantisek Miklosko, que fue uno de los líderes eslovacos en 1989. "No queremos que nadie nos acerque a Moscú".
El líder de Libertad y Solidaridad, Branislav Gröhling, dijo que Fico está llevando al país "a un régimen autoritario como en Rusia y la China comunista." Michal Simecka, líder de Eslovaquia Progresista, que actualmente es el partido más popular del país, dijo que la oposición hará lo necesario para proteger la libertad y la democracia.
"Eslovaquia es y será una nación de gente libre. Y la gente libre no se callará", afirmó. Fico y su partido de izquierdas Smer (Dirección) ganaron las elecciones parlamentarias del año pasado con una plataforma prorrusa y antiamericana. Su Gobierno ha impulsado un plan para reformar la radiotelevisión pública, una medida que, según los críticos, daría al Gobierno el control total de la radio y la televisión públicas.
Esto, junto con la modificación del código penal y la eliminación de un fiscal especial contra la corrupción, ha llevado a los opositores a temer que Fico lleve a Eslovaquia por una senda más autocrática, siguiendo el ejemplo de la Hungría populista del primer ministro Viktor Orbán.
Las opiniones de Fico sobre la guerra de Ucrania y otras cuestiones difieren mucho de la corriente dominante europea. Fico puso fin a la ayuda militar de su país a Ucrania, se opone a las sanciones de la UE a Rusia, quiere impedir que Ucrania entre en la OTAN y planea un viaje a Rusia.
La caída del comunismo
La Revolución de Terciopelo, llamada así por su carácter no violento, tuvo lugar del 17 al 28 de noviembre de 1989 y fue uno de los varios movimientos anticomunistas de finales de los ochenta en Europa del Este. En las manifestaciones y huelgas contra el Gobierno unipartidista del Partido Comunista de Checoslovaquia participaron personas de todo el espectro civil, desde estudiantes hasta disidentes de edad avanzada.
El resultado fue el fin de 41 años de Gobierno unipartidista en el país, el desmantelamiento de la economía de planificación centralizada y la transición a una democracia parlamentaria. Checoslovaquia se dividió pacíficamente en la República Checa y Eslovaquia en 1993.