Rusia ha estado lanzando ataques intensificados contra la infraestructura energética de Ucrania antes de que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, asuma el cargo en 2025.
Ataques rusos contra Ucrania mataron al menos a una persona e hirieron a 22 durante el último día, informaron el viernes las autoridades locales. Moscú lanzó 132 drones contra Ucrania durante la noche, según un informe de la Fuerza Aérea de Ucrania. Se informó que 88 drones fueron derribados por unidades de misiles antiaéreos ucranianos.
Una persona murió después de que Rusia atacara asentamientos en Jersón y otras nueve resultaron heridas, dijo el gobernador Oleksandr Prokudin. Siete personas resultaron heridas en Odesa y cuatro fueron enviadas al hospital. Otras resultaron heridas en Donetsk, Dnipró, Sumy y Kiev, según los medios locales.
Al otro lado de la frontera, las fuerzas ucranianas atacaron un depósito de petróleo en la región rusa de Rostov y destruyeron una estación de radar controlada por Rusia en Zaporiyia durante la noche, dijo también el viernes el Estado Mayor de Ucrania.
Se produjeron incendios debido al ataque, se lee en el comunicado militar. Según se informa, el depósito forma parte del complejo militar-industrial ruso y suministra productos derivados del petróleo al Ejército ruso. Ucrania ya lo había atacado anteriormente el pasado verano.
El Ejército ucraniano también atacó ocho distritos de la región fronteriza de Bélgorod, hiriendo a dos civiles, según el gobernador ruso Vyacheslav Gladkov. Kiev envió un total de 65 municiones y 30 vehículos drones a Rusia durante el último día, informaron los medios rusos el viernes.