Elyazid A., detenido por asesinato en banda y delitos con armas de fuego, se escabulló de los guardias de la prisión durante la puesta en libertad de su compañero de celda el viernes.
Un preso de 20 años que se fugó de un centro de detención cercano a Lyon escondiéndose en el equipaje de un compañero ha sido detenido tres días después de su fuga de la cárcel, según confirmaron el lunes las autoridades francesas.
El hombre, identificado como Elyazid A., originario de Mayotte, fue detenido sobre las 6 de la mañana del lunes en un sótano de Sathonay-Camp, una pequeña localidad al norte de Lyon, según la fiscalía de Lyon.
Estaba huido desde el viernes pasado, cuando eludió a los guardias de la prisión de Lyon-Corbas. No se efectuaron disparos ni hubo heridos durante la detención, llevada a cabo por agentes de la Oficina Central de Lucha contra la Delincuencia Organizada (OCLCO) y de la unidad especializada en la lucha contra la delincuencia DCOS 69, informaron los medios de comunicación nacionales franceses.
Se fuga oculto en una bolsa grande
Elyazid A. había permanecido en prisión preventiva acusado de asesinato cometido en el marco de una banda organizada y de delitos con armas de fuego. Según la información obtenida por el medio de comunicación francés 'Franceinfo', se ocultó en una bolsa grande que pertenecía a su compañero de celda, que iba a ser puesto en libertad ese mismo día.
El cómplice utilizó un carro de equipaje prestado para transportar sus pertenencias a un coche que le esperaba. El personal de la prisión no se dio cuenta de la desaparición de Elyazid A. hasta la mañana siguiente.
Las autoridades han calificado la evasión de muy inusual, señalando que no necesitó cómplices externos, explosivos ni helicópteros, sólo una bolsa sobre cuatro ruedas. En las horas siguientes a la evasión, Interpol emitió una alerta roja para prevenir a la Policía de todo el mundo para que localizara y detuviera al fugitivo.
Buscan al cómplice de la fuga e investigan un fallo de seguridad
El segundo hombre, que se cree que era el que llevaba la bolsa, sigue en libertad y se le busca activamente por su presunta complicidad en la fuga. Según informan los medios de comunicación nacionales, el fiscal de Lyon ha abierto una investigación formal por "evasión en banda organizada" y "asociación delictiva". El caso está en manos de la división del Ródano encargada de la delincuencia organizada y especializada.
El servicio penitenciario francés también ha abierto una investigación interna sobre el fallo de seguridad. En un comunicado, el servicio dijo que "tomaría todas las medidas disciplinarias apropiadas".
La prisión de Lyon-Corbas, donde se produjo la fuga, lleva mucho tiempo padeciendo hacinamiento en sus instalaciones. El 1 de junio, albergaba a 1.222 reclusos en unas instalaciones construidas para sólo 678.