Por Clara-Laeila Laudette
MADRID, 21 sep - El afán por la compra tras el fin de los confinamientos por coronavirus ha reducido el número de viviendas en venta en las grandes ciudades españolas en un 4% durante el último año, según mostraron el martes los datos de Idealista, portal inmobiliario líder en España.
Madrid y la ciudad costera de Valencia en el Mediterráneo han visto caer su inventario de viviendas en venta en un 11%, mientras que en los centros turísticos andaluces de Sevilla y Málaga el número de viviendas disponible se redujo en un 6% y un 5% respectivamente durante el mismo período.
La demanda acumulada durante los primeros 9 meses de 2020 significó que cuando se levantaron las restricciones más duras de Europa en septiembre de 2020, la gente se apresuró a comprar viviendas.
Algunos españoles buscaban un cambio de aires después de haber estado confinados en sus domicilios durante largos periodos, mientras que un aumento del 6,6% en el ahorro de los hogares durante 2020, según un estudio del banco español BBVA, significó que tenían más dinero en efectivo para los depósitos una vez que se relajaron las restricciones.
Entre los descensos más llamativos en la disponibilidad de viviendas en venta se encuentra la ciudad norteña de Pamplona, famosa por sus fiestas taurinas de San Fermín, que vio caer el número un 28% desde septiembre de 2020, según los datos de Idealista.
Barcelona, donde el gobierno local estableció controles de alquiler en septiembre del año pasado, fue la única excepción, con un 7% más de viviendas en venta que hace 12 meses.
"Podría estar relacionado con los topes en los precios de los alquileres: los propietarios podrían preferir no alquilar sus propiedades y optar por venderlas en su lugar", dijo a Reuters una fuente con conocimiento del mercado inmobiliario de Cataluña
"Hay un 40% menos de propiedades disponibles para alquilar en Barcelona que hace un año", añadió la fuente.
Los inmuebles en España siguen siendo populares entre los inversores extranjeros, ya que los británicos representan alrededor del 12% de los compradores, los marroquíes casi el 9% y los franceses y alemanes, entre el 7% y el 8% en el primer trimestre de este año, según datos del Colegio de Registradores.